Las dietas ricas en soja podrían reducir el infarto cerebral
Investigadores de la unidad de Circulación Cerebral Experimental del Hospital La Fe de Valencia han constatado en un estudio experimental en ratas, los efectos positivos de incluir alimentos ricos en isoflavonas de soja para reducir el infarto cerebral o ictus, según informaron fuentes del centro.
Además, estos investigadores están investigando nuevos fármacos para reducir las secuelas de esta patología, con «éxitos» recientes, como el inhibidor de la NO sintasa inducible, la enzima responsable de la producción excesiva de óxido nítrico que resulta tóxico para las neuronas y contribuye al infarto.
El estudio, llevado a cabo por los doctores de la Fundación La Fe, Enrique Alborch, Germán Torregrosa, Juan Salom y otros colaboradores, «ha demostrado el beneficio de las isoflavonas reduciendo las consecuencias del ictus en ratas macho». Sin embargo, según señalaron, aún no han podido constatar «ese carácter beneficioso en el caso de las hembras».
Se trata de la primera investigación de estas características que se hace en España, en la que se incluye la soja en la dieta habitual, si bien se han realizado otros trabajos previos sobre el efecto preventivo de la isoflavona en algunas plantas o bebidas como el té rojo. Según explicó el doctor Torregrosa, estos resultados «inducen a incluir los alimentos con isoflavonas en nuestra dieta habitual», como la soja o las lentejas.
Los resultados están pendientes de publicarse en la revista «European Journal of Neuroscience«, una de las que mayor índice de citaciones tiene en este ámbito, según señalaron. Este estudio forma parte de un proyecto de investigación FIS, realizado al amparo de la Fundación para la Investigación del Hospital La Fe, que se inició en 2004 y está previsto finalizar en 2006. Según Torregrosa, «el siguiente paso va a ser estudiar el impacto de las isoflavonas puras administradas de forma aguda para el tratamiento del ictus».
El ictus es la primera causa de muerte en mujeres, y de invalidez o discapacidad del adulto en España. Actualmente, se calcula que más de 100.000 personas sufren cada año un primer ictus en el país. Esta patología consiste en un trastorno brusco de la circulación cerebral, que altera la función de una zona del cerebro y produce una lesión cerebral inicialmente recuperable en algunos casos, si bien en otros tiene graves secuelas.
Los miembros de la unidad de Circulación Cerebral Experimental de La Fe cuentan con una larga trayectoria de investigación en este área. En los últimos siete años, se han centrado en la investigación del ictus en animales, donde han aplicado un modelo en ratas con el que es posible reproducir con exactitud lo que ocurre en humanos.
Fuente: Azprensa