Conectando células nerviosas con nanotubos de carbono
Nuevos dispositivos biomédicos implantables que actuen como células artificiales nerviosas, controlen el dolor severo, o permitan que músculos paralizados puedan volver a moverse serán posibles gracias a los progresos que la ciencia está alcanzando combinando la biología y la electrónica.
Nicholas Kotov de la Universidad de Michigan junto con otros investigadores de la Universidad del estado de Oklahoma han utilizado nanotubos de carbono para conectar un circuito integrado con células nerviosas.
Los investigadores acumularon capas de nanotubos de carbono para producir una película que era conductora incluso en un grueso de apenas algunos nanómetros. En esa película, hicieron crecer células del precursor de la neurona. Entonces aplicaron un voltaje en una lateral de la película de nanotubos y midieron cualquier efecto eléctrico sobre las células nerviosas. Cuando se aplica un voltaje lateral, una corriente relativamente grande circula a lo largo de la superficie pero solamente una corriente muy pequeña atraviesa la película y las células nerviosas sin dañarlas.
Kotov y sus colegas determinaron que tales dispositivos podían intervenir en la gestión del dolor, pudiendo controlar la actividad de estas células implicadas en la respuesta del dolor reduciendola.
Un dispositivo análogo se utilizó también para estimular las células nerviosas que controlan la contracción del músculo. Los investigadores también sugieren que este estímulo se podría aplicar a las células del músculo del corazón estimulando así este preciado órgano.
Pese a los buenos resultados, el grupo de científicos advierte que todavía queda mucho camino por recorrer para que estos dispositivos lleguen a estar disponibles para los médicos, pero sin duda, tienen un futuro prometedor.
Fuente: Wiley InterScience (Requiere suscripción)