Científicos de la Universidad de Houston han logrado crear el material más oscuro conocido, unas cuatro veces más oscuro que el anterior récord.
Para conseguirlo, se creó una alfombra de nanotubos de carbono que reflejan sólo el 0,045% de la luz incidente. En la imagen, podemos ver la comparación con una pieza de carbón cristalino bajo la luz de un flash, el material del centro es el recién desarrollado.
«Al final, cuando se midió cómo de oscuro era este material, nos sorprendieron los resultados obtenidos, mucho mejores de lo esperados», aseguran los científicos. De hecho, el material se ha presentado al Libro Guinness de Récords Mundiales, y aseguran que puede tener aplicaciones prácticas, en paneles solares y fabricación de telescopios debido a su mínima dispersión de la luz.
El anterior material que ostentaba el récord, era una aleación de níquel y fósforo creado por científicos Londinenses, que refleja el 0,16% de la luz incidente.
Fuente: Physorg
Un equipo de paleontólogos uruguayos han hallado en su país el fósil de una rata que pudo haber pesado más de una tonelada. Este sorprendente descubrimiento, será publicado en la revista británica Proceedings of the Royal Society.
El roedor, cuyo cráneo medía 53 cm, poseía incisivos de varios centímetros de largo, aunque sus molares eran más bien pequeños, lo que hace pensar que se alimentaba de vegetales tiernos, frutas o plantas acuáticas.
Los descubridores estiman que el peso del animal debió oscilar entre los 468 kilos y las 2,5 toneladas, según los métodos de evaluación, por lo que se quedaron con el peso de una tonelada como el más probable. Más que a una rata, el animal debía parecerse a los hipopótamos actuales, aseguran los paleontólogos responsables del hallazgo, Andres Rinderknecht, del Museo Nacional de Historia Natural y Antropología de Montevideo, y Ernesto Blanco, del Instituto de Física de la capital uruguaya.
Esta nueve especie de rata fue bautizada como Josephoartigasia monesi, y ya ha batido el anterior récord en fósiles de roedores, que lo tenía un ejemplar de Phoberomys pattersoni, hallado en Venezuela en 2003 y de un peso estimado de 700 kilos.
Fuente: AFP