La sonda Phoenix amartizó
Sin duda, la noticia del fin de semana, la sonda estadounidense Phoenix se posó por fin, el domingo tras una misión iniciada hace nueve meses, sobre el gélido polo norte de Marte, una zona libre de piedras llamada Vastitas Borealis cuya latitud correspondería en la Tierra al norte de Canadá.
Tras un viaje de 679 millones de km desde que partió en agosto de 2007, y tras ingresar a 21.000 km/h a la alta atmósfera de Marte protegida por su escudo térmico, «Phoenix Mars Lander» se convirtió en la primera nave espacial en llegar a la superficie marciana.
Los científicos aguardaban con ansiedad este amartizaje, un proyecto de 420 millones de dólares de la agencia espacial estadounidense que pretende tomar una muestra del hielo del permafrost ártico de Marte para analizarlo en busca de signos de vida.
Dotado de una cámara, Phoenix desplegará un brazo articulado de 2,35 metros capaz de cavar en el suelo a una profundidad de un metro para buscar hielo y calentar muestras para detectar carbón y moléculas de hidrógeno esenciales para la vida.
Fuente: AFP
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By FXavier, mayo 27, 2008 @ 5:55 am
¡Que horrible es el verbo «amartizar»!
Ya sé que lo usan muchos medios, pero procede, como «alunizar», de un error de lenguaje. La palabra «Tierra» tiene dos sentidos: el planeta y el suelo. «Aterrizar» se refería a la segunda accepción (y de ahí la diferencia con «amerizar»), jamás a la primera.
Por el camino de «amartizar», cuando los humanos lleguemos a cien planetas, planetoides y asteroides, el vocabulario se tendrá que ampliar hasta lo insoportable, con un verbo para cada cuerpo celeste.
Diciendo, simplemente, «aterrizar», nos ahorraremos ese embolao.