Un nuevo traje de baño ha sido diseñado con un tejido que se deshace del agua de forma tan natural como la piel. Al salir del mar o de una piscina, toda el agua que queda sobre su superficie forma gotas y resbala inmediatamente.
Según sus fabricantes el traje tarda solo un instante en estar completamente seco.
La tecnología funciona permitiendo el paso del agua a través del tejido, en lugar de absorberla en su interior. Gracias a ella, los bañistas ya se pueden tumbar en la playa sin la molesta sensación de tener el bañador frío, húmedo y pesado.
El traje ha sido diseñado por Solestrom International, una compañía pionera en trajes de baño con protección de rayos UV incorporada.
El tejido tiene una malla alrededor de cada fibra, invisible a simple vista, pero que crea un material basado en nanotecnología que repele el agua de forma permanente sin interferir con el punto del tejido.
El tratamiento de nanotecnología, similar al utilizado para fabricar tejidos resistentes a las salpicaduras o las manchas, es ecológico y basado en agua.
Traducción: Avances tecnológicos
Fuente: BBC Ciencia
Santino, un chimpancé de 30 años, ha venido a dar la razón a los científicos cognitivos que estudian a los primates: estos primates hacen planes de futuro, al igual que los humanos, y pueden ser tan malintencionados como ellos.
Desde hace diez años, los cuidadores del zoo de Furuvik, al norte de Estocolmo, han venido observando a Santino, que tiene la costumbre de recoger piedras, seleccionarlas y pulirlas con toda calma para luego arrojarlas con premeditación y alevosía contra los visitantes del parque.
Según los científicos, ésta es una de las primeras «pruebas claras de que un animal distinto del hombre puede hacer planes para el futuro de manera espontánea».
«Estas observaciones demuestran de forma convincente que nuestros hermanos, los primates, consideran el futuro de modo complejo…y tienen una conciencia altamente desarrollada», afirma Mathias Osvath, autor principal de un estudio publicado en la revista Current Biology.
Osvath explicó que muchos machos dominantes lanzan piedras cuando se sienten vigilados, porque creen que se está invadiendo su territorio, pero el caso de Santino es distinto porque recoge los proyectiles con antelación, lo que denota una planificación y una premeditación.
«Creo que los chimpancés salvajes deben hacerlo incluso mejor ya que dependen de ello para su supervivencia diaria y el entorno de un zoológico es mucho menos complejo que el de la selva», señaló el investigador.
Fuente: EFE
Una nueva especie de tortuga primitiva ha sido presentada en el Museo del Desierto de Saltillo. Vivió hace 72 millones de años en Coahuila, lo que la convierte en la más antigua de su género, superando al hasta ahora récord de 65 millones de años de un fósil encontrado en Nueva Jersey, Estados Unidos.
El ejemplar, se ha clasificado como Euclastes Coahuilenses, y pertenece a la familia de los quelonios.
La tortuga marina habitó la región hace 72 millones de años en el periodo Cretáceo Tardío y es ancestro de la actual tortuga verde, alcanza un metro de longitud y 70 centímetros de ancho, se distingue de otras especies por su cráneo redondeado y tiene otros elementos particulares, como su mandíbula superior plana y ancha, sumamente desarrollada, lo que permitió conocer que se alimentaba de moluscos.
Fuente: Notimex