El «planificador» de embarazos
Las mujeres británicas que temen que su «reloj biológico» avance demasiado rápido disponen de una nueva herramienta para determinar cuánto tiempo pueden esperar para tener un hijo. Un innovador test presentado esta semana permite estimar la cantidad de óvulos que quedan en los ovarios de la paciente y, mediante una serie de cálculos estadísticos, predecir sus niveles de fertilidad en los siguientes dos años.
«Si tener una familia es lo más importante para una mujer, lo mejor es que intente quedarse embarazada antes de los 30 años», explicó Bill Ledger, catedrático de la Universidad de Sheffield y artífice del invento. «Sin embargo, la realidad de la vida moderna es que las mujeres occidentales, por todo tipo de razones, deciden retrasar este paso y deseo que esta prueba les permita hacer planes de futuro».
Las mujeres interesadas en conocer su futura fertilidad deberán pagar 179 libras (unos 260 euros) a cambio de un completo kit que recibirán por correo en su domicilio. A final de año, está previsto que también se venda en farmacias. La clave del test es una muestra de tres mililitros de sangre que la paciente debe extraer en el segundo o tercer día de su periodo, para luego enviarla a un laboratorio de Oxford. Allí, un equipo de especialistas se encarga de medir la presencia de tres hormonas distintas, que indican el nivel de fertilidad de la paciente, volcar los datos en un sistema estadístico con información sobre centenares de mujeres de edad similar y
así predecir el comportamiento de su «reserva de ovarios» en el siguiente bienio. Días después, la mujer recibe todo tipo de datos sobre su futura fertilidad, desmenuzada en un gráfico explicativo.
De acuerdo con los partidarios del procedimiento, esta información permitirá que las treintañeras planifiquen su futuro con mayores garantías, sin poner en riesgo ni su maternidad ni su carrera profesional. Las pruebas comercializadas hasta la fecha sólo eran capaces de evaluar la cantidad de óvulos restantes, no de predecir la fertilidad de las pacientes en el futuro.
Así, esta prueba reduce la incertidumbre de las mujeres, cuya capacidad de reproducirse decae rápidamente: como media, sus ovarios suelen disponer de 50.000 óvulos a los 20 años de edad, cinco veces más que a los 40. «Tenemos que seguir investigando nuevos métodos, pero de momento este test permite avisar con dos años de antelación de que la reserva de óvulos está decayendo»,
aseguró Ledger.
Inconvenientes
Sin embargo, la prueba no tiene en cuenta otros factores que pueden desencadenar la infertilidad de una pareja, como la escasa calidad del esperma del varón o problemas en el aparato reproductor femenino. Así, las mujeres podrían retrasar sus intentos de quedarse embarazada tras recibir un resultado positivo en el test sin tener en cuenta otras potenciales complicaciones, lo que ha provocado las críticas de algunos expertos.
«El único test de fertilidad verdaderamente fiable es intentar concebir», aseguró Susan Bewley, especialista en maternidad del Hospital Guy and St Thomas de Londres. «Estos kits
pueden empujar a la gente a retrasar este proceso y a darles falsas esperanzas. Las parejas harían bien en invertir su dinero en una cena a la luz de las velas».
Fuente: Portal Tecnociencia