A todos aquellos que de pequeños veían «Erasé una vez: La vida«, entre los que me incluyo, y se fascinaban cuando un glóbulo blanco fagocitaba literalmente alguna bacteria, aquí tenemos un vídeo donde se puede ver este fenómeno de forma real. Sin duda, un documento muy interesante.
Un grupo de científicos españoles han encontrado el fósil de un artrópodo primitivo en los estratos rocosos que conforman la Sierra de Córdoba que hasta ahora era desconocido.
El fósil corresponde a un género nuevo que existió hace 530 millones de años, y pertenece a un grupo poco frecuente denominado Bradoriida, que vivió al comienzo del Paleozoico.
Para encontrar este fósil, los antropólogos realizaron muestreos que se prolongaron durante diez años a fin de prospectar un número suficiente de ejemplares, un total de 21.
Junto con el yacimiento zaragozano de Murero, conocido como «la capilla sixtina de los trilobites» por la excepcional fosilización, enorme abundancia de especímenes y el alto número de especies encontradas, este promete ser también una fuente de sorpresas.
Según la lista roja elaborada por expertos de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) los datos son alarmantes, tras evaluar un total de 44.838 especies, el 38% de las especies animales del planeta se encuentran amenazadas, y en el caso de los mamíferos, uno de cada cuatro corre riesgo de desaparición total.
El estudio muestra que 188 mamíferos se encuentran en la categoría de amenaza máxima, en peligro crítico de extinción, entre ellos el lince ibérico.
La reconversión de la sabana en zonas dedicadas a la agricultura está amenazando también a los primates, mientras que la caza incontrolada es el principal peligro para la mayoría de los mamíferos en Asia. En total, al menos 1.141 de las 5.487 especies de mamíferos se encuentran en peligro de extinción.
Además, hay 29 especies incluidas en la categoría de peligro crítico que podrían estar ya extinguidas puesto que llevan años sin ser observadas, entre ellas el delfín del río Yang-Tsé, o la jutiíta, roedor natural de Cuba.
También se destacó que el 36% de los mamíferos marinos están amenazados por la presión del hombre y la sobrepesca.
Científicos de la Universidad de Stanford aseguran que con un simple análisis de sangre realizado a una mujer embarazada podremos saber si su bebé nacerá con el síndrome de Down.
Esto es de vital importancia, pues actualmente, las pruebas que se realizan entrañan peligro tanto para el feto como para la madre.
La investigación ha sido realizada sobre 18 embarazadas e identificó correctamente nueve casos de síndrome de Down, el siguiente paso será realizarlo a gran escala.
Para llegar a esta prueba, los investigadores determinaron que en la sangre debía haver haber un incremento relativo en la cantidad de «cromosoma 21» (cuya copia extra causa esta enfermedad) en la sangre de la madre pues el ADN puede atravesar la placenta de un cuerpo al otro.
La prueba identifica y cuenta estos fragmentos de ADN y es lo suficientemente sensible para detectar pequeños incrementos de ellos. Sin duda, un importante avance en la detección y la reducción de riesgos en el futuro bebés.
El satélite RHESSI de la NASA ha enviado nueva información del Sol que nos ha revelado la verdadera forma irregular de éste, a un nivel de 0,001 por ciento de esfericidad debido a su gravedad extremadamente fuerte.
Para lograr estos datos tan precisos, el equipo analizó minuciosamente los datos de este satélite, que observa el disco solar a través de una estrecha ranura girando a 15 revoluciones por minuto. La nave espacial de rotación rápida y de alta velocidad de muestreo de datos (necesarios para la captura de las veloces erupciones solares) permiten a los investigadores ver la forma del sol con un menor margen de error, mucho menor que cualquier estudio anterior.
De este modo, descubrieron la verdadera forma del Sol, eliminando el efecto del campo magnético, observando únicamente los efectos del campo gravitacional y el movimiento de nuestra estrella, que lo muestran achatado en los polos y estirado en el ecuador.
«Estos resultados tienen implicaciones que van mucho de la física solar y de las teorías de la gravedad», comenta el físico solar David Hathaway de la NASA. «Ellos indican que el núcleo del Sol no puede tener una rotación mucho más rápida que la superficie, y que la oblicuidad del sol es demasiado pequeña para cambiar la órbita de Mercurio fuera de los límites de la Teoría General de la Relatividad de Einstein».
Una nueva píldora ha sido desarrollada por investigadores del Wellcome Trust en Londres y la Fundación Británica del Corazón, con la combinación de varios medicamentos para combatir a las principales causas de mortaldad del mundo, las enfermedades cardiovasculares.
Bautizada como Red Heart Pill, esta «polipíldora» tiene 4 medicamentos en uno, aspirina para adelgazamiento de la sangre, estatina para disminuir el colesterol, un inhibidor de la ECA (enzima convertidora de la angiotensina) y un diurético de tiazida para la hipertensión.
La píldora será fabricada en la India, y los estudios han demostrado que el medicamento puede reducir la presión arterial y los niveles de colesterol, así como los niveles de homocisteína, una sustancia en la sangre que puede concentrarse y formar una peligrosa placa que conduce a bloqueos en las arterias.
Según investigadores, una simple dosis diaria de la polipíldora contiene los componentes necesarios para evitar 88% de infartos al miocardio y 80% de ataques cerebrales. Se espera que en países en desarrollo pueda ofrecerse a todas las personas de más de 55 años.
Y no sólo será eficiente, si no barata, ya que por 12€ al año estará disponible, algo que no gusta demasiado a las farmacéuticas, que ven como este medicamento amenaza a sus propuestas y los ingresos serán muy inferiores, esperemos que finalmente, no sean los intereses económicos los que dictaminen la puesta en el mercado de este fármaco.
Un grupo de ingenieros del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) han creado un robot submarino que puede mantenerse suspendido sobre un punto bajo el mar de igual modo que hace un helicóptero.
El aparato, bautizado como Odyssey IV está dotado de inteligencia artificial, y se podría convertir en una herramienta muy valiosa para los oceanógrafos, las empresas petrolíferas o para los arqueólogos marinos.
Tiene la capacidad de sumergirse 6.000 metros y es dirigido desde tierra mediante un software instalado en un tablet PC. La idea del equipo de investigación es terminar desarrollando un submarino que sea totalmente autónomo durante un año.
Las posibilidades del nuevo submarino van más allá de simplemente ver un objeto. “Como los grandes helicópteros, puede coger un carga bajo el agua, ahora, podemos visitar un pozo petrolífero, tomar una muestra y sacarlo a la superficie”, aseguran los desarrolladores. Además, han incorporado al Odyssey un brazo mecánico que permitirá, por ejemplo, manipular una válvula. Y por si esto fuera poco, además es rápido, pudiéndose mover a una velocidad de dos metros por segundo.
Si cada vez más gente deja los bolígrafos a un lado para utilizar agendas electrónicas, móviles o portátiles, los románticos tienen un nuevo invento que batallar, un bolígrafo que reconoce los trazos al escribir y almacena esta información para posteriormente recuperarla, utilizarla en la pantalla de un proyector, volcarla en el ordenador o enviarlo por mail.
El bolígrafo, bautizado como Papershow, está dotado de tecnología Bluetooth, una llave USB que aloja el programa, blocs y papel con trama para escritura digital. Tiene unas dimensiones de 16 x 2 centímetros y un alcance inalámbrico de seis metros. La llave USB almacena hasta 256 MB.
Para registrar la escritura manual, también lleva incorporada una micro-cámara y al combinar el bolígrafo con el programa de la llave USB, la información pasa al ordenador y se consigue una compatibilidad en tiempo real del trazo manual y el digital.
Los pterosaurios, prehistóricos reptiles con alas y uno de mis preferidos cuando era niño, no podían volar, según un científico japonés que asegura que los animales con un peso superior a 40 kilos son incapaces de mantenerse en el aire.
La revista científica New Scientist explica esta la hipótesis del profesor Katsfumi Sato, de la Universidad de Tokio, que echaría por tierra la creencia de que los pterosaurios, que podrían pesar 250 kilos, eran una suerte de dragones que surcaban los cielos hace 200 millones de años.
El científico puso pequeños acelerómetros (unos dispositivos que miden la aceleración y la fuerza de la gravedad) en las alas de de 28 aves de cinco especies diferentes en las islas Crozet, entre Madagascar y la Antártica, entre las que se encontraba el albatros errante, la especie más grande capaz de volar en la actualidad.
Sato descubrió que cada especie voladora bate las alas a dos velocidades diferentes: rápidamente para despegar y despacio para mantenerse en el aire cuando no hay viento. Según el científico japonés, la velocidad máxima a la que un animal puede batir sus alas está limitada por la fuerza de sus músculos y decrece en las especies más pesadas de largas alas.
Un ave cercana a los 40 kilos, explica, no tendría suficiente margen de seguridad para volar con mal tiempo. Un pterosaurio, con una envergadura de más de 15 metros, podrían haber pesado más de 250 kilos, algo que los sitúa fuera del límite establecido.
Como es lógico, esta afirmación ha entrado en un conflicto frontal con muchos paleobiólogos que indican que, a pesar de que ese umbral resulta «problemático», en el caso de los pterosaurios hay que tener en cuenta las características anatómicas, fisiológicas y el medio ambiente en el que vivían estos reptiles. En cualquier caso, la polémica está servida, y tiene difícil demostración a estas alturas.
Expertos rusos de la Universidad estatal Tomsk han realizado un estudio para comprobar lo que sucede en nuestro organismo cuando se carece del campo magnético terrestre. Y los resultados no son nada buenos, ya que su ausencia podría provocar que los astronautas desarrollen trastornos mentales durante los vuelos espaciales, en particular en expediciones a Marte.
Los experimentos fueron realizados con 12 ratas, en una unidad especial donde el campo magnético terrestre fue reducido a un milésimo de su fuerza durante 25 días. Los animales perdieron habilidades sociales, tenían problemas con la memoria y experimentaron cambios en sus órganos internos, a veces, volvían a examinar el entorno como si no lo conociesen.
Según los investigadores, el campo magnético terrestre afectaría a todos los organismos vivos. De hecho, ciertas catástrofes, como por ejemplo la extinción de los dinosaurios pudieron estar conectadas a la desaparición del campo magnético.
En las naves espaciales viajan a altitudes relativamente bajas, pero donde el campo magnético se encuentra reducido en cerca de 20 por ciento respecto a la superficie de la Tierra. Como prevención, los científicos proponen crearlo de manera artificial en las naves para prevenir trastornos mentales.