Un equipo de científicos estadounidenses han resuelto el misterio que envuelve a la flor más grande del mundo, que a su vez es también la que peor huele (en la imagen). Mide aproximadamente un metro de ancho y fue descubierta en un bosque tropical lluvioso de Sumatra en 1818, pero no fue descrita precisamente como una planta bonita por culpa del desagradable aroma que desprende, similar al de la carne podrida.
Según la revista Science, los científicos han utilizado el análisis genético para resolver el misterio del linaje de la flor llamada rafflesia, descubriendo que proviene de una antigua familia conocida por sus flores, pero no por grandes, sino por diminutas. De hecho, muchas de sus «primas» botánicas tienen flores de unos apenas unos milímetros de diámetro.
Así ha quedado probado que la rafflesia pertenece a la familia de la euforbiáceas, que incluye también a la flor de Nochebuena, las campánulas irlandesas, el árbol de goma, la planta de aceite de castor y la yuca. Las raras características de la rafflesia llevan décadas intrigando a botánicos de todo el mundo, que deseaban averiguar dónde encajaba esta extraña planta en el árbol botánico de la vida, especialmente por averiguar la evolución de esta planta parásita, que roba los nutrientes de otra planta mientras engaña a los insectos que la polinizan.
La planta vive en medio de enredaderas tropicales, donde sólo su flor es visible. Carece de hojas, brotes y raíces, y no emplea la fotosíntesis, el proceso que usan las plantas para aprovechar la energía de la luz del sol.
La flor, de color rojizo o anaranjado, puede llegar a pesar siete kilos y es capaz de emitir calor, probablemente mimetizando el de un animal recién muerto para seducir a las moscas de la carroña que la polinizan.
Unos científicos británicos han creado varios tipos de gallinas genéticamente modificadas capaces de poner huevos que contienen proteínas útiles para fabricar fármacos contra el cáncer y otras enfermedades.
Los expertos del Instituto Roslin de Edimburgo (Escocia), donde se creó la oveja clonada Dolly, han criado 500 gallinas ponedoras a partir de una especie común llamada ISA Brown, cuyo ADN manipularon con la introducción de genes humanos productores de proteínas.
Esas proteínas humanas se localizan después en la clara del huevo, de la que pueden extraerse fácilmente para la elaboración de fármacos.
Otros científicos habían logrado antes crear pollos transgénicos, pero esta es la primera vez que la modificación genética introducida perdura varias generaciones, lo que podría permitir un suministro en masa y de bajo coste de componentes para medicinas.
Uno de los tipos de gallina creado por los científicos de Roslin produce interferona, un agente antiviral que se utiliza a menudo en los fármacos contra la esclerosis múltiple, otros serían útiles para tratar cánceres de piel y artritis.
«Esto tiene el potencial de convertirse en una muy buena manera de producir medicamentos especializados, hemos criado cinco generaciones de gallinas y hasta ahora todas continúan produciendo grandes concentraciones de fármacos», declaró Karen Jervis, de la empresa de biotecnología Viragen, que ha colaborado en el proyecto.
La compañía estadounidense Boeing está desarrollando un nuevo avión con una característica sencilla pero más importante de lo que podría creerse: será de un solo color. Los ingenieros han descubierto que fabricando aviones monocromos tendrían una menor resistencia al aire en pleno vuelo, lo que permite un gran ahorro de combustible por año y avión. Aprovechando el llamado flujo laminar de las corrientes de aire, se evita el rozamiento con los flujos turbulentos, lo que deriva en un menor consumo de carburantes.
Concretamente el modelo será el Boeing 787-Dreamliner donde la zona de carga tiene una superficie fina, ajustadamente controlada, que mantiene dicho flujo laminar a mayor distancia de ella que los diseños estándar. Mantener así el flujo laminar reduce el rozamiento de la nave en vuelo porque este flujo produce mucha menos fricción en la superficie que los flujos turbulentos.
Para conseguir mantenerlo resulta necesaria una superficie continua y fina, que no tenga irregularidades en la pintura, irregularidades que suelen producir los cambios de color de los esmaltes o de los detalles pintados que se añaden a los aviones.
Boeing ha elegido el color gris para el 787 porque complementa la apariencia metálica de la zona de carga o de pasajeros. Según los cálculos de los ingenieros de Boeing, las capas de pintura, comunes en los aviones para identificar las aerolíneas, incrementan el consumo de combustible en 113.562 litros por año y avión, por lo que un cambio así, teniendo en cuenta el precio actual de los carburantes, contribuirá positivamente a las economías de las aerolíneas.
Este nuevo modelo se espera que sea comercializado en 2008.
Mucho se ha hablado de un hipotético ascensor espacial que conectaría la superficie terrestre con el espacio, facilitando así tareas como llevar suministros a la Estación Espacial Internacional, o incluso personas.
Si bien al principio parecía más un tema de ciencia ficción, poco a poco han ido surgiendo noticias de una puesta en marcha real, así como diversos prototipos del ascensor en cuestión.
Su desarrollo se basaría en un cable de nanotubos de carbono (material super-resistente) desde la superficie del planeta hasta una plataforma orbital situada a una altitud de 35.000 Kms, y luego utilizar la tecnología de levitación magnética para subir y bajar la carga, o los pasajeros, de la tierra al espacio.
Pues bien, si como me ocurría a mí, a vosotros también os cuesta imaginarlo, seguro que este vídeo os aclarará un poquito mejor su funcionamiento.
SemBioSys Genetics Inc. una compañía de biotecnología, ha anunciado que su planta de producción de insulina ha demostrado en pruebas realizadas en animales que es equivalente desde el punto de vista químico, estructural y funcional a la insulina humana de gradación farmacéutica de EE.UU.
Los resultados de los ensayos analíticos, in vitro y en vivo confirman que la insulina producida en cártamo, el cultivo comercial de SemBioSys, es indistinguible de la insulina humana, tanto analítica como fisiológicamente. La autenticidad química y estructural se ha confirmado a través de la espectrometría de masas y del análisis de identificación de los péptidos. La funcionalidad de la insulina producida por cártamo se ha demostrado gracias a la utilización de los ensayos de fosforilación de receptores in vitro, confirmando la actividad biológica en células humanas.
Finalmente, SemBioSys ha demostrado su equivalencia funcional a través de la conducta de un test de la tolerancia a la insulina realizado en ratones, que controla los niveles de glucosa en sangre como variable del ensayo.
La demanda de insulina para el tratamiento de la diabetes alcanzó la cifra estimada de entre 5.000 y 6.000 kilos en 2005, y está previsto que aumente hasta los 16.000 kilos en el año 2012. SemBioSys cree que su insulina producida por cártamo puede reducir los costes de capital en comparación con la fabricación de insulina existente en un 70%, y los costes de producción en un 40% o más.
Científicos del CSIC y de la Universidad de La Laguna (Tenerife) han descrito por primera vez cómo una bacteria marina obtiene energía de la luz para crecer, cuando hasta ahora se pensaba que los únicos seres vivos capaces de utilizar la luz en el mar eran las algas, a través de la fotosíntesis.
Este trabajo, que se publica en el último número de la revista Nature y que incluye además a varias instituciones científicas de Suecia, desvela que una bacteria marina aprovecha la luz para estimular su crecimiento gracias a una molécula (la proteorodopsina), y su presencia modificaría el flujo de carbono en la superficie del océano, según los científicos.
La mayor parte de las bacterias marinas es heterotrófica (requiere materia orgánica para su crecimiento), y al igual que todos los animales, respiran oxígeno y producen dióxido de carbono. No obstante, según el científico Carles Pedrós-Alió del CSIC, «estudios moleculares recientes han detectado en algunas bacterias marinas un mecanismo alternativo de obtención de energía, a través de la luz».
Del mismo modo que los paneles solares aprovechan la energía del Sol para convertirla en energía eléctrica, las proteorodopsinas, unidas a una molécula de retinal, utilizan la energía solar para convertirla en energía bioquímica. Esta energía «extra» les proporciona mayor eficiencia de crecimiento, de forma que consumiendo la misma cantidad de materia orgánica, consiguen formar una descendencia hasta cuatro veces mayor.
Como consecuencia de este proceso, una comunidad microbiana rica en estas bacterias crecería más y produciría mucha más materia orgánica en partículas a partir de la misma cantidad de sustrato, lo que proporcionaría más alimento a niveles más altos de la red trófica marina y aceleraría el ciclo de carbono, según los expertos.
Estas implicaciones en el flujo de carbono en el océano afectan así a la regulación de la concentración de CO2 en la atmósfera y a los mecanismos implicados en el cambio global.
Si pensabas que lo que estaban de moda eran las esculturas gigantescas o a tamaño natural, unos científicos coreanos han decidido hacer todo lo contrario, crear una minúscula estatua del tamaño de un par de células sanguíneas.
Se trata de «El Pensador» del escultor francés Auguste Rodin, que muestra a un hombre en solemne meditación batallando contra una poderosa lucha interna.
El tamaño de la escultura es de 20 millonésimas de metro, apenas el tamaño de un par de células sanguíneas. Para su modelaje han sido necesario emplear nuevas técnicas microscópicas además del desarrollo de nuevos biosensores.
Los científicos-artistas han cuidado hasta el más mínimo detalle, pues la figura es tan fiel a la real, que hasta se distinguen los diferentes músculos del modelo.
Un grupo de científicos ha logrado crear un primer mapa detallado de la llamada «materia oscura» de la que está constituido básicamente el universo.
Se trata de partículas que no pueden ser detectadas por la radiación que emiten y no son visibles en ninguna parte del espectro electromagnético, pero cuya existencia se infiere de los efectos gravitatorios que causa en la materia visible como estrellas o galaxias.
Los astrónomos que la estudian anunciaron el domingo haber logrado la tarea que parecía imposible de crear imágenes tridimensionales de algo que se había resistido hasta ahora a todo intento de detección desde que se lanzó la hipótesis sobre su existencia en 1933.
A diferencia de lo que ocurre con los distintos cuerpos celestes, visibles al ojo humano gracias a los poderosos instrumentos de observación como los telescopios, nadie ha visto hasta ahora la materia oscura ni sabe de qué está compuesta, aunque algunos cálculos efectuados por los astrónomos indican que es al menos seis veces mayor que el resto del universo visible combinado.
Con ayuda del telescopio espacial Hubble, un equipo de setenta astrónomos europeos, estadounidenses y japoneses ha logrado crear una imagen de la materia oscura en una región del espacio que contiene galaxias de varios miles de millones de años.
Uno de los descubrimientos más importantes de los astrónomos es que la materia oscura parece formar un armazón o esqueleto en torno al cual se constituyó el universo visible. Aunque los cosmólogos suponían que debía ser así, el descubrimiento constituye una demostración sensacional de que sus cálculos eran correctos y que sin materia oscura no podría existir el universo tal y como lo conocemos.
El doctor Panos Zavos, polémico experto estadounidense en técnicas de fertilidad, ha revelado en Londres que ha implantado un embrión humano clonado en el útero de una mujer. La «madre de alquiler» tiene 35 años y el implante se produjo hace dos semanas en un lugar desconocido por razones de seguridad, aunque lo que sí se sabe es que no se trata de EEUU, Gran Bretaña o algún país de la Europa continental.
Sin aportar prueba alguna, el científico ha explicado que la mujer, cuya identidad o nacionalidad se han mantenido en secreto, padecía una menopausia precoz y su marido no puede producir esperma, por lo que la pareja era la apropiada para un tratamiento de fertilidad.
Zavos se ha declarado «muy optimista» ante los resultados del experimento, aunque también «muy realista sobre el hecho de que podemos fracasar». Pero «lo intentaremos una y otra vez hasta que tengamos éxito», recalcaba el médico, que hace causa común con el andrólogo italiano Severino Antinori, conocido por su reiterada disposición a clonar un ser humano.
El experto estadounidense anunció también sus controvertidos planes para crear «bebés de repuesto». Esa iniciativa se concreta en la división de embriones clonados en dos partes: una al que se permitiría el desarrollo hasta convertirse en niño, y otra que se guardaría como «repuesto».
Según el experto, ese bebé de recambio podría usarse, bien como suministrador de tejidos y órganos para mantener en caso de enfermedad de su hermano, bien como futuro niño que podría ayudar a las parejas que no son fértiles. Si habéis visto la película La Isla, sabréis que el argumento gira en torno a esto, la posibilidad de crear repuestos humanos a partir de un clon de uno mismo.
Científicos estadounidenses han descubierto una nueva fuente de células madre en el líquido amniótico que rodea a los embriones en desarrollo, según un informe publicado por la revista Nature Biotechnology.
Los científicos indicaron que esas células madre ya han sido utilizadas para crear tejido muscular, óseo, vasos capilares, nervios y células hepáticas constituyéndose en la principal vía de investigación para poder tratar enfermedades como la diabetes y el mal de Alzheimer.
Después de siete años de investigación se ha podido encontrar verdaderas células madre en el líquido amniótico, que pese se intuya su existencia no se había demostrado hasta ahora. Bautizadas como «células derivadas del líquido amniótico» (AFS), pueden representar una etapa intermedia entre las células madre embrionarias y células madre adultas ya que «estas células son capaces de renovarse, una característica que define a las células madre pero también pueden utilizarse para producir una amplia gama de células que podrían ser valiosas en una terapia«, señaló uno de los investigadores.
La principal ventaja que aporta este descubrimiento es su pronta disponibilidad, así como un nuevo argumento para evitar los eternos problemas éticos que acarreaba extraer este tipo de células de embriones humanos.